-
.
Edited by Reed Richards - 5/5/2021, 06:13
. -
.
Ha pasado un tiempo respetable desde los sucesos de Hell's Kitchen, pero aún no puedo sacarlos de mi cabeza. Todavía recuerdo las cosas que tuve que hacer para salir con vida de allí, no puedo olvidar como fui abandonado por todas esas personas que, alguna vez, consideré que eran mi propia familia. Los días se han vuelto un calvario para mí, he perdido la cuenta de las noches que llevo sin poder conciliar el sueño. Todo lo que tenía me ha sido cruelmente arrebatado, mi esposa me dejó tirado y ahora está muerta, mi hijo también lo está.
Aún escucho esa voz en mi cabeza, que me habla diariamente para recordarme lo miserable que es mi existencia. En más de una ocasión he contemplado la idea de volarme la cabeza y terminar con mi sufrimiento, pero no, no puedo darme por vencido. Debo vencerlo, él no es más fuerte que yo. He buscado la solución a mis problemas, pero ha sido como dar vueltas en el mismo lugar, siempre termino estancado en la misma problemática... ¿La ciencia puede ayudarme en esta ocasión, o debo recurrir a algo que esté más allá de mi comprensión?
Siempre he confiado plenamente en todo lo que la ciencia pueda afirmar, pero tal vez tengo que abrir los ojos y permitir que mi conocimiento se expanda incluso más allá de los límites que yo me he impuesto. Escuché los rumores de un lugar en el Tíbet, sobre la existencia de un clan de monjes capaz de ayudarme a controlar a la bestia que me está dominando. Es un viaje largo, pero es la única opción que me queda, ya no tengo otro lugar a donde ir. He decidido hacer mi equipaje y aventurarme en una travesía a un sitio que ni siquiera sé si existe en verdad o es simplemente un invento como tantos.
He recorrido distancias inconmensurables, expuesto a temperaturas realmente bajas que serían mortales para cualquier otro. Durante mi camino, he podido escuchar su voz en el viento, me está llamando. Quiere que me rinda, está intentando jugar conmigo... Pero hay algo que no sabe, ¿cómo intentas quebrar la voluntad de un hombre que lo ha perdido todo, al cual ya no le queda nada?
Ya se cumplen algunos días desde la última vez que pude comer, ya no tengo raciones. Mi cuerpo ya no está respondiendo, simplemente sigo caminando porque me niego a aceptar que he fracasado. Sin embargo, en cuanto creí que todo estaba perdido, pude verlo... El templo sagrado del que tanto se hablaba. En cuanto llegué a sus puertas, ellos me acogieron, dispuestos a ayudarme y convertirse en mis mentores. Pero solo me dieron una advertencia...
— Olvida todo lo que creas saber, abre tu cabeza e indaga en los confines más profundos de tu mente.
Edited by Reed Richards - 21/4/2021, 23:30. -
.Reed Richards recibe 100 EXP por su historia..
-
.
Desde ese momento, mi vida cambió rotundamente. Los días se convirtieron en meses, y los meses se desvanecieron en años... Toda mi vida estuve enfocado en la ciencia y en mis experimentos, pero ahora había mucho que aprender. Estos hombres me permitieron abrir los ojos, pude ingresar a los rincones más profundos de mi mente e indagar en ellos, descubriendo cosas que, sin su ayuda, jamás lo hubiera hecho. A medida que ellos me transmitían su conocimiento, yo intentaba perfeccionarlo cada vez más. Estaba logrando controlar a la bestia que durante tanto tiempo me estuvo acechando, pero mi objetivo no era suprimirla, era dominarla y expulsarla de mí. Supe darme cuenta de las cosas que estaban a mi alcance y reanudé con mis investigaciones, pero con una ambición mucho más grande: combinar lo esotérico con lo mundano.
Durante años, combiné la tecnología y la magia, llegando a crear cosas con las que el mundo exterior únicamente podía soñar. A medida que avanzaban mis estudios, comencé a inclinarme nuevamente hacia la ciencia... Pero esta vez, con los ojos de quien ha visto que nada es imposible. Que ninguna ley de nuestro mundo es absoluta.
Pude olvidar completamente a ese hombre que dedicaba su vida a desarrollar inventos enfocados en hacer que la sociedad prospere, encontré mi verdadero camino y estaba dando los primeros pasos, mi avance a la cúspide era inminente. Llegado el momento, supe que tenía que empezar a jugar mis cartas y sabía por donde iba a empezar. Tenía que crear una nueva identidad, Reed Richards había muerto, él ya siquiera formaba parte de mi pasado. Estuve mucho tiempo completamente aislado de todo, y a pesar de que el final de mi camino aún estaba muy lejos, tenía que moverme. Necesitaba ver en qué se había convertido el mundo desde que lo dejé y, junto a los monjes, emprendí un viaje para reunir recursos para la creación de todo lo que tenía en mente.
Convertí el nivel superior del templo en mi propio cuartel, desde allí podía verlo absolutamente todo mientras trabajaba en mi nueva invención. Tras un realmente breve plazo de tiempo, finalmente terminé con mi trabajo... Un visor de pantalla compuesta, cuyos receptores se encargaban de extraer señales de ondas de radio, señales de satélite, transmisiones televisivas y prácticamente todo lo que estuviera presente a nuestro alrededor. Ahora tenía ojos y oídos en todos lados.
. -
.
Todos los preparativos estaban listos, después de tanto tiempo, iba a concretar mi venganza. Esa noche me fui a dormir y estaba ansioso por lo que iba a suceder en los próximos días, pero había algo en mi cabeza que aún no me dejaba en paz. Ellos aparecieron en mis sueños, todas las personas que había dejado atrás, Susan, Larsson, Jonathan, Wendell y... mis padres. Durante mi estadía en el templo, adquirí una cantidad increíble de conocimientos que jamás hubiera conseguido por mi cuenta, pero en un momento de lucidez pude darme cuenta de algo... El Kraken se estaba saliendo con la suya, él quería que yo destruyera absolutamente todo y pudiese completar lo que él no. Fue allí cuando una batalla se empezó a librar en mi interior, el Reed Richards que aún estaba recluido en lo más profundo de mi ser, estaba luchando contra esa malvada y oscura entidad.
Después de haber pasado la noche sin dormir, pensando en lo que iba a hacer, volví a New York. Iba a dar un último paseo, quería recordar como era la ciudad y fui a Central Park, allí había un grupo de adolescentes persiguiendo a lo que parecían ser unos mutantes, decidí seguir a un grupo de personas que iba a Harlem, pues había unos cuantos rostros conocidos en él. Cuando llegamos, una muchacha manifestó sus habilidades y el cielo se nubló completamente... En ese momento, mi peor pesadilla apareció frente a mí, la que me lo había arrebatado absolutamente todo, que usó mi cuerpo y capacidades para cometer actos completamente atroces. Aún tenía un as bajo la manga y decidí usarlo, recurrí a la combinación de la tecnología y la magia para una última cosa, pude enlazar mi consciencia con la de la mutante y entré en mi propio subconsciente, para luchar contra el Kraken.
Él sabía muy bien cuales eran mis debilidades y defectos, iba a atacarme con eso, pero no contaba con algo: yo tenía el control, estabamos en mi cabeza, mi territorio, el lugar que mejor conocía en el mundo. Tras una contienda realmente intensa, escapó directamente para alojarse en la cabeza de la mutante y trasladar la batalla al plano físico, pero la rápida intromisión de Wendell hizo que la muchacha caiga inconsciente y, junto a ella, el Kraken. Me sentía realmente débil, como si me hubieran arrebatado una parte de mí, por lo que no tenía tiempo que perder. Aprovechando el poco tiempo que me quedaba en pie, ordené a los sistemas de mis instalaciones que se autodestruyeran, la sociedad necesitaba una segunda oportunidad y esos artilugios no podían caer en las manos equivocadas. Después de hacerlo, entré en un callejón y mi cuerpo se volvió extremadamente pesado, empecé a ceder y finalmente quedé inconsciente...
Pasaron varios días hasta que pude despertar, pero durante ese tiempo, logré recordar una charla que había marcado un antes y un después en mi vida...
Mientras el Kraken estuvo alojado en mi cabeza, no estuve consciente de todo lo que estaba haciendo, de los crímenes y asesinatos que cometió aquella entidad. Pero de algo estaba muy seguro y era que, a pesar de no haber sido el encargado de perpetrarlo, tenía que asumir la responsabilidad y arreglar todo el daño que hizo.
Edited by Reed Richards - 5/5/2021, 18:52. -
.Reed Richards recibe 150 EXP por su historia..
-
.
No era capaz de tolerarlo, no podía ver a todos esos niños privados de vivir una infancia normal, ver que muchos hombres con las más oscuras intenciones los torturaban y golpeaban hasta dejarlos inconscientes y, en algunas ocasiones, hasta la muerte. Empecé a cuestionarme si realmente estaba de acuerdo con los métodos que Red Skull tenía para asegurar a la humanidad y mantener a raya a aquellos que, supuestamente, habian intentado destruirnos...
A la salida del campo de concentración, fui interceptado por alguien, era un tipo que vestía unos extraños ropajes blancos y parecía conocerme. Él me dijo cosas que nadie podía saber, cosas como el nombre de mi padre, de mi hija y otros datos puntuales que no estaban al alcance de cualquier persona, él realmente parecía conocerme... Aún recuerdo todas las cosas que dijo, estaba realmente convencido de que todo lo que me estaba diciendo era verdad, lo pude ver en sus ojos. ¿HYDRA realmente había salvado a la humanidad, como todos creíamos?
Estuve dándole vueltas en mi cabeza a cada una de las palabras que él me habia dicho y, poco a poco, todo estaba empezando a tomar forma. Pasé las noches encerrado en mi oficina, bebiendo y culpándome por haber colaborado con un genocida, cerraba los ojos y lo único que podía ver eran los rostros de todos aquellos inocentes que habían muerto y también de todos los que estaban muriendo ahora mismo. Tuve la opción de acabar con todo, de volarme la cabeza y librarme de todos mis problemas, pero no tuve el valor para hacerlo. No tuve el coraje de abandonar a mi familia y a todos los demás, no tuve la valentía de dejarlos a su suerte. Hasta que un día regresé al lugar en donde todo empezó alguna vez, ese sitio que vio nacer mis primeros inventos, el cuarto que vio nacer cada una de mis ideas y en el que quedaron recluidas muchas de ellas.
En cuanto tomé la decisión, supe que no había vuelta atrás, estaba poniendo en riesgo no solo mi vida, si no la de todas mis seres queridos... ¿Pero qué más tenía que perder?
Mi esposa era una de las cabecillas de un movimiento que se había encargado de sembrar el caos y la destrucción no solo en el mundo, sino también en el espacio-tiempo y en la realidad, mis mejores amigos y la gente en la que confiaba ahora estaban orgullosos de trabajar para Red Skull... Me dí cuenta que ya no tenía absolutamente nada, que debía encontrar una forma de resolverlo todo. El camino no iba a ser para nada fácil, siquiera estaba seguro de si iba a poder lograrlo, pero aún así tenia que intentarlo.. -
.Reed Richards recibe 50 EXP por su historia..
-
.Reed Richards siempre había sido un hombre de hechos. De cosas que pudiese enlistar y comprobar. Era lo que lo hacía sentir seguro. Pero últimamente, ni siquiera los hechos parecían estar de su lado.
¿El primer hecho? Susan había muerto.
El segundo. Él no había hecho nada para evitarlo.
El tercero. Había matado a muchísima gente.
El cuarto. La ciencia, y por lo tanto él, no podía traerlos devuelta.
Reed sacudió la cabeza, dándole un sorbo a la taza de café que tenía en la mano. A esas horas de la noche, le sabía a petróleo. La culpa le había impedido disfrutar de cualquier cosa desde que su esposa, y también su hijo, habían muerto sin que él moviera un dedo para ayudarlos. Vaughn había intentado convencerlo de que no era su culpa, de que cuando sucedió no era él mismo. Pero eso a Reed no le importaba. Su mente no funcionaba como la de los demás. Él se ceñía a los hechos, a lo comprobable. No a lo emocional. Y lo comprobable es que al no ayudarlos los había matado. A ellos y a cientos de personas más. Le dolía la cabeza, había pasado cinco horas en su tanque de pensamientos y no había obtenido nada. No podía devolverles lo que les había quitado. La vida.
Tomó una serie de planos de su escritorio y se levantó. Observó las piezas que tenía a su alrededor, los trozos de metal, las luces que parpadeaban devolviéndole la mirada. Todo se veía más sombrío sin Susan. Ella ya lo habría obligado a salir, a tomarse un descanso, a cenar con ella por más que no hablaran porque su cabeza seguía en el laboratorio que lo habían arrastrado a emocionar. Pero no estaba y lo cierto es que rara vez salía. Siguió pensando en Susan, en lo mucho que la necesitaba... y entonces se le ocurrió.
Si quería enmendar sus errores, lo primero que necesitaba era un compañero.
Edited by UMHRPG DIRECCIÓN - 20/5/2021, 23:52. -
.
Cada vez que cerraba los ojos, podía ver los rostros de cada una de las personas que habían muerto por mi culpa. Perdí la cuenta de los días que llevaba sin dormir, descansar y aparentar que todo estaba bien no era una opción para mí.
— Voy a necesitar mucho café.
Con los planos en la mano, fui hacia las mesas del laboratorio y aparté todo, como si ya no tuviese importancia alguna. Finalmente me concentré en mi nueva tarea, empecé a reunir todas las herramientas y piezas que necesitaba para crearlo. Confié en muchas personas que me decepcionaron y no podía volver a pasar por lo mismo, necesitaba un compañero que sea completamente fiel a mí, que supiera rescatarme cuando me perdiese en los confines de mi propia mente y ayudarme a encontrar una solución.
Las horas se convirtieron en días y los días en semanas, puse todos mis esfuerzos en la creación de mi nuevo compañero. Cada taza de café era como un cachetazo que me ayudaba a seguir enfocado en mi trabajo. Perdí completamente la noción del tiempo y cuando ver mi reflejo en el espejo del baño, ya no me reconocía. Lucía como una imitación barata de un náufrago sacado de una novela de Jules Verne. Ya no recordaba lo que se sentía estar en el exterior, en contacto con la naturaleza, con la vida misma. Pero tampoco quería hacerlo, todo lo que el mundo tenía para mí se volvió cenizas junto a la catedral de San Patricio.
Ingresé los últimos códigos en la computadora, tomé una silla y me senté a esperar que se hicieran todas las actualizaciones correspondientes en el software. Si todo estaba bien, en unos pocos minutos iba a presenciar como mi nuevo compañero llegaba a la vida. Ese poco tiempo que tuve, me permitió cerrar los ojos por un segundo y descansar. Estaba realmente agotado, empecé a sentirme cada vez más relajado hasta que, al final, sucumbí ante el sueño.
Desperté de sobresalto cuando escuché que alguien me estaba llamando, me froté los ojos y pude verlo frente a mí.
— ¿Ha dormido bien, Doctor Richards?
Me levanté de la silla y lo observé, no pude evitar sonreir, por primera vez en mucho tiempo me sentía realmente feliz.
— Hora de trabajar, H.E.R.B.I.E.. -
.Reed recibe 50 EXP por su historia..
-
.
QUOTE[!] Reed Richards desaparece y dedica el resto de su existencia a un bien mayor: protegerlos a todos..
Cogito ergo sum |
